Cada préstamo tiene una comisión fija, establecida de antemano según la evaluación de tu empresa. Esta comisión se suma al importe total del préstamo y se paga poco a poco con las cuotas mensuales.
Antes de aceptar una oferta preaprobada, verás el importe exacto de la comisión en el detalle de la oferta.
El importe no cambia: no hay intereses ni costes ocultos.
Ten en cuenta que si solicitas un límite más alto, la nueva oferta incluirá una nueva comisión fija.